Trípodes malévolos, monstruos mitológicos, todo registrado y fuertemente asegurado en libros (gracias a Dios!). Nacidos en la mente del autor, una sucesión de ideas que llevan a construir una personalidad concreta. A final de cuentas solo son parte de una mentira muy bien formulada, intentos de ser dios creando algo superior a los humanos. Tan "superiores" que son prisioneros de algo tan insignificante como cualquier ser vivo con la capacidad de recordar imágenes. Tan insignificantes para ser destruidos tan rápidamente como la capacidad de olvidar de los humanos, y cuyo reino de terror se extiende de oreja a oreja. Por cierto, si quieren un monstruo que en realidad cause pánico el único y verdadero monstruo obviamente es Godzilla (el cual es 100% real, pregúntenle a cualquier japonés), en proporción ha asustado a más gente (todo niño asiático) que cualquier otro monstruo. Todo esto sin contar las 15 veces que destruyo Tokio y alguna ocasión Nueva York (las películas hablan por sí solas). Y respecto al destino del blog... en realidad solo espero que tengamos más lectores que entradas, porque de lo contrario estaríamos por la calle de la amargura y caería de nuevo en depresión.
Yami
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